1 de septiembre de 2016

Sueños de Aurora

Hay gente que sueña y otros que caminan, hay quien piensa lo que hará si le toca la loto y otros que tienen una pequeña lista de sueños por cumplir. He conocido gente que soñaba con ser lo que no es y personas que sólo deseaban trabajar para poder comprar un horno en el que hornear. El mundo está lleno de sueños y soñadores y a veces sin darnos cuenta vuelven del baúl del olvido y se juntan para hacerse realidad.
Yo un día tuve una de esas listas, con caminos, sueños y retos que ya forman parte del pasado, otros no los recuerdo, pero si alguno todavía seguía vivo en mi mente, era ver auroras boreales. Y así ha sido. Ayer, en una noche fría como ninguna hasta ahora, en la que el rocío se congeló sobre la tienda, Islandia me dio un hasta siempre que jamás olvidaré.
Sobre la tienda, el cielo estrellado se llenó de estelas de colores que se movían pausadamente, como si un pintor rozara el firmamento con un pincel de algodón y la suavidad de la brisa los moviera sutilmente a su antojo.

El mundo está lleno de sueños por cumplir, no dejes que el tiempo pase demasiado, antes de hacerlos realidad.

Un abrazo silencioso.

Geysir que No

Desde donde el fenómeno de la naturaleza toma nombre, despido mis pedales hasta la próxima aventura. Hoy toca coger un bus hasta Reykjavik, lugar en el que montaré la tienda por vez última en Islandia y donde el sábado empacaré la bici para el domingo poner rumbo a casa. Quise hacer un día más de ruta, pero empacar la bici no es tarea fácil y nunca se sabe lo que puede acontecer por el camino.
Gracias por los ánimos, a los que animaron y por los recuerdos los que me recordaron.
Nos vemos pronto.
Gullfoss Falls
Geysir